El mundo es cada vez más digital, más móvil y más conectado. En este panorama hacerse un hueco en el mercado y permanecer en él exige a las empresas tener los medios tecnológicos y digitales para ofrecer a clientes y proveedores lo que necesitan en cada momento. Por todo ello, es clave disponer de una buena infraestructura de red inalámbrica.
Pero, ¿a qué llamamos infraestructura de red inalámbrica? A grandes rasgos se podría decir que son todas las conexiones y tecnología que permiten que los dispositivos permanezcan unidos a una red y que se puedan movilizar sin la necesidad de usar un cable. Es decir, que ordenadores, tablets, móviles y cualquier otro dispositivo de IoT puedan estar conectados e interconectados desde cualquier parte y sin cables.
Características de una buena infraestructura de red inalámbrica?
Todo esto lleva a plantearse cómo debe ser la infraestructura de red inalámbrica de una empresa, qué factores son importantes que contenga una red WiFi. Lo primero que hay que tener en cuenta es que debe buscarse o mejor dicho diseñarse una solución a medida. Crear una red inalámbrica que dé respuesta a las necesidades concretas del negocio.
Entre los factores más destacados que debe contemplar una buena infraestructura de red inalámbrica están:
- Flexibilidad. El modo en el que se trabaja actualmente está ligado a la movilidad y al uso de diferentes dispositivos. Además, muchas compañías operan en la cultura del Bring Your Own Device (BYOD), es decir, que los empleados utilicen sus propios dispositivos para acceder a los recursos de la empresa. Todo esto implica disponer de redes flexibles que faciliten este modo de trabajo.
- Seguridad. Ligado estrechamente a la flexibilidad de acceso está la seguridad. Hay que pensar que en la empresa se manejan datos de gran relevancia e información confidencial. Además, en el caso del uso de dispositivos personales ajenos a la compañía son aún más necesarias vías de conexión seguras. Por todo ello, la empresa debe contar con una plataforma de gestión adecuada a su actividad que le proporcione funcionalidad, control y seguridad.
- Conectividad. La tecnología que proporciona una infraestructura de red inalámbrica debe estar dimensionada al tamaño y necesidades de cada negocio. Se debe desarrollar una solución, sobre todo para pymes, que permita añadir más puntos de acceso a medida que el negocio crezca. En resumen, hay que contemplar implantar una infraestructura escalable y que asegure la fiabilidad de los accesos.
Mejoras para la empresa
La inversión en una infraestructura de red inalámbrica adecuada a cada empresa va a reportar importantes beneficios. Entre ellos va a mejorar la eficiencia del trabajo. Va a permitir manejar gran cantidad de datos y a soportar múltiples dispositivos y usuarios de manera simultánea sin experimentar retrasos ni caídas de red.
Así, se reducen los tiempos de inactividad favoreciendo la eficiencia y mejorando la productividad. Además, también se mejora la colaboración y la comunicación dentro y fuera de la empresa optimizando resultados y mejorando la imagen de la compañía.
Otra ventaja asociada a disponer de una infraestructura de red inalámbrica es el ahorro de costes que puede suponer para una pyme. Al no tener que cablear toda la empresa, se reducen los gastos de instalación y mantenimiento de la red. Asimismo también se pueden ahorrar costes en la compra de equipos, ya que se pueden utilizar dispositivos móviles en lugar de ordenadores de sobremesa.